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-ESPUÉNDOLAS. ERMITA DE SAN JULIÁN DE ASPRILLA- |
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Para acceder
a esta antigua iglesia hay que tomar el desvío hacia Espuéndolas,
localidad situada en la margen derecha de la carretera entre Sabiñánigo
y Jaca. Entrando ya en el caserío hay que seguir una pista que sale
a nuestra izquierda, pasa junto a unas balsas existentes sobre el pueblo y
después sigue en dirección norte. No hay que desviarse de la
pista principal. Cuando ésta va a comenzar un descenso hay que dejar
el coche en una pequeña anchura a izquierda de la pista y ganar la
corona de Asprilla caminando apenas 100 m. El
despoblado del cual fue parroquial está vallado en todo su perímetro,
pero el templo está fuera del mismo y está visitable, con permiso
de la vegetación existente por doquier (Impresiones de mi primera
visita en julio de 2003) (2003, 2005 y 2008).
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A lo lejos,
la silueta del templo no parece sino una más de las bordas de la zona
ya que por su arcaicismo carece de ábside semicircular (Imágenes
1 y 2). No hay que dejarse
engañar por las apariencias pues es un templo hispanovisigodo de inicios
del siglo XI con cabecera plana y bella puerta con arco de herradura a los pies
del muro sur (Imágenes 5 a 11).
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El templo
se halla canónicamente orientado y su fábrica esta compuesta a base de sillarejo.
Los arcos de herradura o de medio punto de ventana y credencia interior poseen
dovelas en cuña de tosca y precisa talla. Su estructura sufrió
varias restauraciones que han dejado huella en el mismo. La más aparente
es el arco gótico apuntado existente al interior (ver página
siguiente). También es evidente la distinta calidad y colocación
de sillarejos en la zona superior y sur de la cabecera (Imagen 1). Centra su cabecera un ventanal de
arco de medio punto dovelado con estrecho vano rehundido (Imagen 4).
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El elemento
que sin duda realza la personalidad y el interés al templo es la puerta
que se ubica a los pies del muro sur. Se trata de un vano de arco de herradura
realizado a base de sillarejos y un par de piezas doveladas que en conjunto
conforman una bella figura (Imagen 6).
La vegetación que invade el interior del templo también deja
semioculta su puerta pero permite apreciar con claridad su estilo y valor.
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Al interior
la puerta se halla rehundida en el muro bajo un dintel de madera. Su
estilo es en todo similar a las ya vista en Santa María de Espierre. Es una verdadera
lástima que un templo de su antigüedad e importancia en lo que
representa de cara a la cronología del arte románico en nuestra
región se halle en un estado tal de olvido, máxime cuando su
estado permitiría todavía su consolidación y recuperación.
Todo
esto decía tras mi primera visita en julio de 2003 al lugar. Con posterioridad,
en mayo de 2005, la Asociación de Vecinos de Espuéndolas procedió a limpiar
la zona y eliminar la maleza que asolaba el templo con fondos de la empresa
Alcoa de Sabiñánigo. Ahora aguarda una consolidación de lo existente así como
la colocación de una cubierta que impida su deterioro. (VER
NOTICIA EN PRENSA)
