LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO
Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España)
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-OSIA. ERMITA DE LA VIRGEN DEL ROSARIO (Cont.)- |
  UTM 30T 694275 4703054 742 m |
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No me queda más remedio que rendirme a la evidencia de que existen las casualidades. El 25 de septiembre de 2003 recibí un correo de Toño Pardo vinculado familiarmente a "casa Canela" de Anzánigo. Conoció mi trabajo por Internet y me daba noticia de un crismón reutilizado y semioculto por la hiedra en Osia. Quince días antes habíamos quedado con Ana e Isaac de "casa Albero" y Mosen Benito, para comer el 27 en Osia, justo en la casa contigua a la que posee el crismón en su fachada. El azar es importante, qué duda cabe. Pero recuerdo una frase de Sir Alexander Fleming cuando le acusaban que el descubrimiento de la penicilina fue por pura casualidad: "La casualidad solo favorece a las mentes preparadas".
Justo frente a la iglesia parroquial, un joven matrimonio (Encarna y Juan Pedro) están rehabilitando "casa Malo" (Imágenes 2 y 3). En una pequeña ventana semioculta por la hiedra al repicar hace unos tres años el enfoscado de las jambas, Juan Pedro se dio cuenta de que aparecía un crismón (Imagen 4). Otra vez la casualidad, pero con un intermediario que conoce y es apasionado de estas manifestaciones artísticas por lo que su descubrimiento lo puso de manifiesto con cuidado y esmero. Retiró el enfoscado de la jamba derecha y de nuevo la sorpresa: una bella cruz de brazos simétricos epigrafiada (Imágenes 6, 8 y 9). Un lujo de ventanal al que la hiedra intentaba silenciar su antiguo mensaje. Ante mi deseo de tomar imágenes de estas piezas, Encarna me facilitó el acceso al ventanal y ella misma cortó con la podadera la hiedra que lo ocultaba. (Las imágenes con la hiedra seca corresponden a otras visitas).
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La jamba izquierda del ventanal la compone un bloque de arenisca rectangular centrado por un crismón de 36 cm de diámetro que se sitúa rotado 90 grados a nuestra izquierda. Se inscribe en un aro marco formado por el resalte del vaciado del bajorrelieve. Está muy bien conservado y realizado con buena técnica (Imagen 7). Se trata de un crismón de ocho brazos con un esbozo de rosetón central formado por una estrella de ocho puntas sin decoración en su superficie. A los símbolos clásicos "X", "P" y "S", se suman otros dos, atípicos, bajo los brazos horizontales. A nuestra derecha, una letra omega minúscula, y a nuestra izquierda, un símbolo que semeja un "ocho" horizontal, levemente abierto en sus extremos y con pequeños remates a modo de bolitas limitando las aperturas.
Pero no acaban aquí las excepciones de esta bella pieza: entre el brazo de la "P" y el superior izquierdo de la "X" se talló una cruz de brazos simétricos sobre lo que podría ser el noveno brazo de la pieza. El resto de los símbolos: La "A" tampoco es habitual: apuntada de brazos curvos y con un apéndice a modo de badajo colgando del puente formado por un triángulo curvilíneo. La "W", grande con formato simple de ancla. El Vano de la "P" es sencillo en su ejecución y la "S" también de gran formato, remata sus extremos en sendas garras, al igual que todos los brazos del crismón.
La imagen 6, muestra la ventana una vez desenfoscada y eliminada la hiedra que la ocultaba. Además la luz del mediodía con sus sombras añadidas realzan cruz, crismón y fecha del dintel (1836), época en la que probablemente se rehizo el ventanal con los elementos aquí mostrados.
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Mis amigos Matarredona y Olañeta profundos conocedores de los crismones siempre han comentado que el Sodoruel es excepcional en este tipo de manifestación artística por el arcaicismo y rareza de sus piezas. Ésta viene a confirmar lo dicho. Paco Matarredona no sabía de su existencia por haber estado oculto tras el enfoscado. Ya le he mandado noticia e imágenes para su próximo libro.
En la jamba derecha de la ventana apareció otra pieza no menos interesante. Sobre un bloque rectangular de arenisca, vemos un círculo inciso un poco mayor que el anterior en cuyo interior hay una cruz también incisa de brazos iguales cuyos extremos se adornan con pequeña concavidad. En sus cuatro ángulos hay bezantes, alguno perdido.
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El conjunto está girado 90 grados a nuestra izquierda (Imágenes 6, 8 y 9. El brazo superior de la cruz aparece más desgastado que los otros tres (Imagen 9). Presentan una inscripción realizada de forma que yo no he visto en el periodo que estudio. Las letras no son incisas sino "de bulto, a base de rebajar la arenisca contorneando su silueta. Están apretadas y adaptándose y llenando por completo el exiguo espacio existente. Me recuerda el "horror vacui" de las decoraciones visigóticas. Se identifican letras aisladas pero no soy capaz de interpretar el mensaje que tratan de enviarnos.
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En el último edificio a nuestra derecha saliendo del pueblo, en funciones de "espantabrujas" de un pequeño ventanuco en la fachada este, podemos ver lo que parece una estela funeraria también infrecuente como casi todo lo que por aquí se halla (Imágenes 10 y 11 - UTM 30T 694426 4702977). Parece dar noticia del fallecimiento ("transit") de un sacerdote ("presbites") "GA...".
En fin, muchos cabos sueltos de un todo que aunque vislumbro no me atrevo a conjeturar. Dejo la tarea para quienes están preparados a este fin aportando la imágenes tomadas el pasado sábado 27 de Septiembre de 2003.
Osia, en el "Sodoruel" (denominación local de los aledaños de la peña Oroel) esconde -y en ocasiones muestra- parte de su magia y misterios medievales.
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