Vemos a continuación las pinturas del muro sur
del templo, las mejor conservadas a causa de la menos humedad de los muros
orientados al lugar con más horas de sol al día. Cliqueando sobre cada uno de las escenas o los detalles
de los tímpanos e intradoses de los arcosolios accederás
a su imagen ampliada.
Según la profesora Lacarra, hay no menos de tres
manos o talleres pictóricos distintos en este templo. En primer
lugar se decoraron las superficies en altura de los muros sur y norte
con escenas de san Juan Bautista y de la vida de la Virgen. Mas tarde se decoró el arcosolio de don Eximino
de Foces, después el de Atho y por fin, en otra campaña
y con otro estilo, los situados en el muro norte. Todo ello abarca desde
las últimas décadas del siglo XIII a las primeras del XIV.
En esta zona superior del muro sur se narran diversos
pasajes de la vida de san Juan Bautista. De izquierda a derecha y de arriba
a abajo: Ofrenda en el altar del sacerdote Zacarías (su padre).
Encuentro de María y su prima santa Isabel en el que la escena
alude al tema de agua y peces, símbolos de Cristo y el Bautista.
Nacimiento de Juan el Bautista (Sobre Isabel hay un cartel que dice "ELISABET").
María con Cristo niño reconocible por el nimbo crucífero
rodeados de ángeles con cirios y santos. Probable escena de san
Juan en el desierto (deteriorada). Bautismo de Cristo por san Juan. Herodes,
Herodía y Salomé. Decapitación del Bautista, el primer
mártir. Sepulcro de san Juan. Profanación y segundo martirio
de sus restos, recogidos por frailes. Reconocimiento documental de sus
reliquias.