|
|
LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
|
| Presentacións | Novedades | Mapa del Sitio | Mapas Activos | Opinión | Castillos XI-XIII | Rutas Románicas | Monográficos | Otras Regiones Enlaces | Bibliografía | Diccionario | Distinciones | Premio Romanico Aragonés | Fondos de Escritorio | Inicio | |
|
-ARDISA. ERMITA DE SAN JUAN DE BARTO- |
|
Desde diversas fuentes me llegaban noticias de la existencia de una ermita en la orilla derecha del río Gállego, en la sierra Carbonera entre Santa Eulalia y Ardisa. La advocación es a san Juan de Barto y hacia el 2003 se realizaron en la misma obras de consolidación para evitar su ruina total. Hoy 6 de diciembre me he escapado a comprobar lo allí existente.
Partiendo de Ardisa, a orillas de Gállego, hay que atravesar el pueblo y seguir una pista paralela al río durante poco más de un kilómetro. Después la pista gira hacia el oeste siguiendo la orilla derecha del barranco de San Juan, en dirección a Lacasta. La seguimos hasta cruzar el barranco, punto en el que hay que tomar el desvío a nuestra izquierda. Desde aquí unos tres kilómetros más y llegamos a las ruinas buscadas. Siete kilómetros en total. Aporto en cabecera el track para el GPS de este trayecto (6 de diciembre de 2012).
12
El templo es de una sola nave, orientada y con cabecera plana. Se diferencian dos mitades. La situada al oeste es más moderna. La de cabecera podría corresponder a un momento muy avanzado del siglo XIII. Ni los sillares ni su hechura son ya románicas.
345
Quedan en su interior tres arcos apuntados que arrancan desde el pavimento. También un pilar en el tramo de los pies, que colaboraría a sustentar un piso elevado comunicado con la edificación adosada al norte. La cabecera posee tres altares en línea. El del norte, desaparecido. Junto a la portada norte de acceso, la pila benditera se halla llena de agua; no bendita sino de la lluvia del día anterior.
678
Hay alguna marca de cantería en forma de "V" en el muro norte junto a la portada; ménsulas decoradas en el acceso al edificio adosado que comunica por medio de otra portada con el templo y poco más. Se han consolidado los arcos, así como los muros que amenazaban ruina. Y si se concluyera la restauración y cubriera, duraría mucho tiempo. No es románica; pero merece la pena la excursión. Además, el lugar es tranquilo.
91011
Páginas consultadas: |