UTM 30T 633047 4552980 773 m

(ZARAGOZA) Ver mapa interactivo de la zona

El 22 de Septiembre de 2003 acompañé a José Luís Aramendía en una agradable jornada en la que visitamos y tomamos imágenes de los cuatro templos románicos de Daroca. A la tarde, a pesar de una inoportuna tronada con viento, agua y piedra, nos acercamos hasta la ermita de El Santo, en Tosos. Una jornada completa en la que disfrutamos de iglesias en las que ya se solapan románico y mudéjar. Posiblemente algunos de estas fábricas sean las más antiguos del mudéjar aragonés.

Cliqueando sobre cada una de las imágenes accederás en detalle al templo indicado. (22 de septiembre de 2003 y 2007).

Murallas de Daroca	Colegiata de Santa María y de Los Corporales
San Juan de la Cuesta	Santo Domingo	San Miguel - "San Valero"

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Daroca es una interesante ciudad fortificada de notable reminiscencia medieval situada a unos 75 km al sur de Zaragoza en la vega del río Jiloca. (Ver PLANO de Daroca). Fue punto estratégico en las vías que desde Zaragoza apuntan hacia Teruel y Valencia, y por tanto ciudad fronteriza en la conquista de ambos territorios.

Alfonso I la recuperó a los musulmanes en 1122, siendo desde entonces punta de lanza en la conquista de las tierras del sur. Como tal territorio fronterizo le concedió fuero con grandes libertades. A la muerte de Alfonso I, la difícil situación en que quedó el reino repercutió en esta ciudad que quedó prácticamente despoblada hasta que en 1141 Ramón Berenguer IV fomentó su repoblación, declaró colegiata a Santa María y la consideró dominio destacado de sus posesiones.

Daroca fue una de las poblaciones asignadas en dote a las reinas aragonesas (Doña Sancha: 1182; Leonor: 1221; Violante: 1245) desde tiempo de Alfonso II; lo que justifica y mantiene su belleza ornamental a finales del siglo XII. De esta época datan las iglesias mostradas.

(Estractado de "Aragón: La España Románica" Ediciones Encuentro 1979)

"Tropas cristianas de Daroca, Teruel y Calatayud se disponían a conquistar a los moros el castillo de Chío, Luchente, distante tres leguas de Játiva el día 23 de febrero de 1239. El capellán, D. Mateo Martínez, de Daroca celebraba momentos antes misa en la que consagró seis formas destinadas a la comunión de los seis capitanes de aquellas tropas. Un ataque del enemigo obligó a suspender la misa, ocultando el capellán las formas envueltas en los corporales en un pedregal del monte. Rechazado el ataque se encontraron las seis formas empapadas en sangre y pegadas a los corporales. Surgen las disputas entre los presentes por quién ha de ser el que lleve a su ciudad el milagroso paño. Se decide colocarlo sobre una mula y que a ésta se la deje andar y allí donde se pare queden depositadas las seis hostias ya que ello sería la voluntad de Dios. La mula fue a caer muerta en la puerta de la iglesia de San Marcos, hoy convento de religiosas de Santa Ana junto a la puerta baja donde estuvo depositado algún tiempo hasta su traslado a la colegiata de Santa María de los Corporales."

(Tomado del folleto informativo editado por el Ayuntamiento de Daroca)