|
|
LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
|
| Presentacións | Novedades | Mapa del Sitio | Mapas Activos | Opinión | Castillos XI-XIII | Rutas Románicas | Monográficos | Otras Regiones Enlaces | Bibliografía | Diccionario | Distinciones | Premio Romanico Aragonés | Fondos de Escritorio | Inicio | |
|
"BERNARDUS": UNA FIRMA EN VARIOS CAPITELES DE JACA
1
Si hay un templo románico que suscita controversias, ese es sin dudas la catedral de San Pedro de Jaca. Controversias en torno a temas tan claves como son su cronología, sus etapas edificativas, los maestros que trabajaron aquí, sus fuentes de inspiración, las influencias generadas así como las interacciones con templos tanto próximos (Iguacel, San Juan de la Peña, Loarre) como lejanos (San Millán de Segovia, San Martín de Frómista, Santiago de Compostela..)
A través de este sitio web he estado haciendo referencias a algunos de estos aspectos por medio de trabajos tan interesantes como el de Prado Vilar basado en el sarcófago de Husillos ("Saevum Facinus" 2009) o el de Bernabé Cabañero "Precedentes musulmanes y primer arte cristiano" (Colección Actas; Institución Fernando el Católico 2007).
Cada uno de los trabajos que leo me hace volver a mirar con otros ojos a San Pedro de Jaca y a otros templos que creía suficientemente conocidos. Y a base de mirar, reflexionar, fotografiar y revisar detalles de lo fotografiado, en ocasiones aparecen nuevas evidencias que quizá puedan ayudarnos a encajar nuevas piezas o a recolocar otras en este interesante puzle que es el Arte Románico.
Ya hace algún tiempo que había localizado una marca de cantero en uno de los cuatro grandes capiteles que coronan las pilastras cilíndricas del templo. Es una "S" ubicada en el ángulo nordeste del capitel señalado con el número 3 en la imagen de la planta del templo realizada por Esteban Lorente.
2 3
El hecho de haber localizado esa marca de cantero en un capitel, que no figura especificada en el trabajo acerca de las marcas de cantería realizado por Rodrigo de la Torre (Breve memoria de los signos lapidarios de la catedral de Jaca 1985) me estimuló en primer lugar a revisar todas mis imágenes y posteriormente a realizar nuevas fotografías desde todos los ángulos de esos cuatro grandes capiteles.
Pues bien, las sorpresas han saltado en los dos capiteles situados en el lado norte del templo (números 1 y 2 de la planta). Al ser capiteles no historiados es habitual que fotografiemos su lado mejor iluminado dado que los motivos esculpidos se repiten circularmente en sus cestas. Nada había visto en esas tomas. Ahora bien, cuando uno se sitúa en la nave norte, pegadito al muro y alza el teleobjetivo a contraluz, el "lado oscuro" de esos capiteles empieza a dar sorpresas.
4 (
La imagen 4, sobre estas líneas, corresponde al lado norte del capitel señalado con el número 1 en la planta del templo (Imagen 12). Esa fue la imagen que al ampliarla empezó a mostrarme pequeños detalles. Resaltados con círculos amarillos, el correspondiente al número 3 señala el lugar donde se halla una deliciosa culebrilla labrada con esmero y que muestro ampliada en la imagen 5. Sus hechuras delicadamente esculpidas son acordes con otras serpientes esculpidas en diferentes lugares del templo, la más emblemática de las cuales se halla en el tímpano de la portada oeste.
Hay otro detalle, señalado con el círculo número 4; pero a él volveremos más adelante.
5
Otros detalles que llamaron mi atención se sitúan en el capitel señalado con el número 2 en la planta . En la imagen 3 del capitel entero, señalo con circulitos amarillos la ubicación de dos signos que llamaron la atención. En el señalado con el número 1, una letra aparentemente "R", mejor visible en la imagen 6, bajo estas líneas. El círculo señalado con el número 2, se advierte una marca de cantero: una "B" tumbada (Imagen 8).
6
Realmente no parecía tener mucho sentido el hecho de que hubiese dos marcas de cantero diferentes en el mismo capitel, así que en otra visita al templo (11-diciembre-2009) volví a tomas imágenes con el teleobjetivo centrado a su máxima longitud focal sobre esa zona. Además de la "R" ya se adivinaba algún signo más como pudimos comprobar in situ mosen Jesús Lizalde, Belén Luque y yo.
Luego, al trabajar las imágenes en el ordenados, aparece la sorpresa: la "R" es una letra dentro de un nombre entero. Más resaltada porque quedó en ella cal que la hace destacar.
Colocando el cursor sobre la imagen activa 7, aparece sobrescrito el nombre al que me refiero: "BERNARD-us" con la terminación abreviada con una vírgula.
Bernardus. Un nombre que en época medieval no era infrecuente entre personajes relacionados con la escultura. En Santiago de Compostela se citan dos: Bernardo el Joven y Bernardo el Viejo. Bernardus Guilduinus en San Serenín de Tolosa. Bernardo en la portada de Puilampa en Sádaba (Zaragoza)..
El nombre viene a explicar la marca de cantero, la "B", que curiosamente no he visto el el resto del templo, aunque he de volver a buscarla con más detenimiento. Tampoco en su estudio cita haber hallado ninguna "B" Rodrigo de la Torre, lo cual hasta cierto punto es aceptable si nombre y marca corresponden a un maestro importante en la escultura del templo. No parece muy normal que se dedicase a labrar sillares o dovelas.
8
Bien, sigamos adelante. Ya tenemos un "Bernardus", sin "me fecit". Nombrado como maestro, sin más. Y además la primera letra de su nombre como marca de cantero en la cesta del capitel.
Más arriba dejábamos en suspenso otro detalle que llamó mi atención en el ángulo noroeste del "capitel de la culebrilla". Lo señalaba con el número 4 en la imagen 4. Centrando las lentes en esa zona (Imagen 9) distingo una letra clara. Es una "N", y hay otra delante... Ampliación a máxima posibilidad y otra nueva sorpresa...
9
La imagen 10, bajo estas líneas corresponde a esa ampliación. Es activa y colocando el cursor sobre ella se advierten con claridad, la mencionada "N", una "R" delante y al final una "S": ..RN....S letras que son compatibles de nuevo con Bernardus, si bien este término habría que comprobarlo realizando tomas fotográficas o calcos de la inscripción ascendiendo a nivel del capitel.
Hasta aquí lo objetivo. La evidencia. Dos capiteles singulares coronando pilastras cilíndricas del lado norte del templo en los que aparecen detalles que estimo pueden tener una gran importancia. Dos epigrafías que parecen apuntar a un nombre de persona y a su marca de cantería. Un detalle escultórico (la culebrilla) que relaciona el magnífico capitel de abigarrada decoración vegetal con otras esculturas realizadas por el escultor de corte clásico conocido como "maestro de Jaca".
Luego, en el lado sur del templo, el capitel más anterior tiene una "S" que apunta a una autoría diferente, atestiguada por la calidad inferior de su labra con respecto a los dos mencionados. Dos maestros: "B" y "S" esculpiendo capiteles de gran porte. Nada extraño, puesto que en Jaca se advierten labores escultóricas de varias manos y calidades.
En la cabecera del templo, los "capiteles con suplemento" tienen estilo más rudo que los atribuidos al maestro clásico, además de poseer un módulo diferente, lo que obligó a recrecerlos con medio capitel más, como mostré en este artículo. Esta escultura es más acorde con la vista en Iguacel.
Volviendo la mirada al artículo de Bernabé Cabañero, la secuencia edificativa del auténtico caos que fue la edificación de Jaca en lo tocante a lo arquitectónico, cobra sentido: templo que se inicia bajo la forma de hacer de los constructores lombardos aprendida por canteros locales. Corresponde a las siete primeras hiladas del ábside norte, lombardistas, con lienzos rehundidos y lesena medial continuadas en altura con sillares del primer arte jaqués. Primer arte jaqués que hallamos desde el inicio del ábside sur y que a un metro del pavimento, cambia orientándose hacia las formas del románico pleno.
Cambio asumido por un arquitecto italiano que sigue el plan primitivo del templo y alza dos pilares cruciformes a mitad del templo, con triple esquina lombarda pensando cubrir con bóvedas de arista naves central y laterales siguiendo el esquema del "tramo lombardo". Pero no se atreve y cambia el proyecto para cubrir con madera a dos aguas, no edificando los apeos de los muros laterales para recibir bóvedas.
11
Pasado el tiempo, nuevos artistas se suman a la obra. El claustro, obra posterior, recibe obras de otro escultor conocido como el "Maestro de Doña Sancha" y de otro, magistral, que esculpe personajes mofletudos que recuerdan a los vistos en la portada de Mediavilla de San Serenín Tolosa en el que algunos han querido ver la mano del Maestro Esteban.
Creo que se ha enjuiciado cronológicamente a los templos basándose en la escultura que los adorna y dejando de lado a la arquitectura que a fin de cuentas es de mayor trascendencia. Se discute acerca de que si Frómista es anterior a Jaca o no, basándose en la escultura y que no encaja la evidente fecha 1072 de Iguacel con la escultura de Jaca... pero ¿de qué escultura de Jaca estamos hablando? porque puede ser compatible la escultura de la primera fase, antes de la llegada del "gran maestro clásico" con lo visto en Iguacel. Más adelante llegará el maestro clásico, el que se inspira en Husillos, ensaya en Frómista y triunfa en Jaca: capiteles más altos son el primero de los problemas que hubieron de subsanar. Allí, en Jaca están las respuestas en ese delicioso caos mezcla de dudas titubeos y diversas olas artísticas y religiosas.
Quizá debamos de volver los ojos al templo y seguir mirando, porque allí quizá nos aguarden más piezas del puzle.
12
Bueno... pues resulta que cuanto más miro, más veo. He repasado una vez más las imágenes en busca no sé bien de qué y resulta que al lado de la segunda epigrafía, la incompleta que mostraba en las imágenes 9 y 10 y a su izquierda, sobre la voluta intuyo otra marca de cantero. Es en la zona señalada con el círculo de nuestra izquierda en la imagen 13
13
Ampliando esa zona en las imágenes de las que dispongo obtengo lo mostrado en la imagen activa número 14, bajo estas líneas, colocando el cursor sobre la misma señalo el trazo que intuyo, y que parece ser... ¡Una "B"!, claro, en paralelismo con lo detectado en el otro capitel: nombre del cantero + marca de cantero (la primera letra de su nombre)... uff! está claro que necesito hacer nuevas fotografías y que en algún momento habrá que "tirar de escalera", lo que ocurre es que esto está más alto y es más complicado que en Biota. (Creo que necesito ayuda)
Es vienes 18 de diciembre de 2009. He vuelto a subir a Jaca a repetir imágenes y reconozco que cuantas más vueltas le doy a este asunto, más dudas me asaltan. Las compartiré con todos vosotros a la par que muestro imágenes de esta mañana para que dudéis conmigo o saquéis conclusiones.
15
Por seguir un procedimiento riguroso en lo formal, comenzaré haciendo balance de los hechos ciertos.
1- Hay en Jaca cuatro grandes capiteles, de módulo superior al del resto de los del templo y también a los habituales en la época románica. Según medidas de Juan Francisco Esteban Lorente, este capitel de la imagen 15 da 1,27 metros de altura y su diámetro superior es de 1,62 metros (Artigrama Nº 14; pp.: 242-262. 1999)
2- Estos cuatro capiteles se alzan de modo espectacular en lo alto de pilares circulares de alrededor de 6 metros de altura, incluyendo a sus basas.
3- En tres de los cuatro capiteles mencionados (señalados con los números 1 a 3 en la imagen 12), he localizado epigrafía; unas veces en forma de marca aislada de cantero ("S" y "B") y en otras, letras que en un caso permiten leer por dos veces un nombre ("BERNARD") y en otro parecen formar parte de otro nombre, que no llego a identificar ("...N....S")
4- A continuación señalo el lugar concreto de lo indicado en el punto anterior:
a) Marca "S": Capitel número 3 en la imagen 12, sobre la voluta nordeste (Imagen 11).
b) Marca "B": Capitel 2 en la imagen 12, a media cesta en su lado norte (Imagen 8). Tras ella. en un nuevo hallazgo, he localizado con tenues rasgos los signos: "E", "R", "N", "A" y una "R" mucho mejor perfilada (Ver página siguiente)
c) Epigrafía "BERNARD": Capitel 2 en la imagen 12, en la base del lado oeste de su cesta (Imágenes 16 y 17)
d) Probable epigrafía de la que solo identifico con seguridad dos de sus letras "...N....S": Capitel 1en la imagen 12, en su ángulo superior noroeste (Imágenes 18 y 19)
Hasta aquí los hechos formales. Bajo estas líneas algunas de las imágenes de los mismos: La imagen 17, activa, muestra la epigrafía señalada en el punto 4-c y corresponde a la zona coloreada en la imagen 16, recortada y girada 90º a la izquierda
16
La imagen 19, activa, corresponde a la señalada en el punto 4-d y corresponde a la ampliación de la zona coloreada en la imagen18
18
Hasta aquí, pues, lo evidente. A partir de este punto, comienzan las dudas, las reflexiones y las disquisiciones. Resulta tentador soñar con el nombre del "Maestro de Jaca", claro está.
El nombre de BERNARD -no estoy seguro de que haya una abreviatura tras él (US)- es algo así como una provocación. Es un nombre que evoca nombres de personajes míticos entre los constructores románicos.
No me encaja la "humildad" de dejarlo de modo casi vergonzante en un capitel. No se ha labrado con la misma eficacia que las marcas "B" en el mismo capitel o "S" en otro. En su contra, el hecho de que el aspecto es de grafiti, si bien la altura y lugar donde se ubica, limita mucho a los posibles autores. Pudieron llegar allí operarios en la edificación de las bóvedas de crucería, quienes desmontaron el coro existente en el tramo central de la nave, o quienes restauraron con escayola los desperfectos en los capiteles causados por el citado coro.
Si se escribió con el capitel colocado, la grafía apunta a persona ubicada en la nave lateral norte.
Otro hecho ¿casual? es la coincidencia de la marca de cantero (auténtica) "B" en este capitel con la primera letra del nombre sometido a duda "BERNARD".
A partir de aquí, poco más puedo aportar, dado que creo sensata y acertada una sentencia que he leído hace poco "En las alturas, las telas de araña parecen molduras".
La imagen bajo estas líneas corresponde a un sillar de las jambas de acceso a la capilla de San Victorián, en el monasterio viejo de San Juan de la Peña. El firmante tuvo en este caso la cortesía de cara a futuros investigadores de señalar su cargo (Diputado Provincial) y el año de su excursión (1853)
20
De todas formas, creo que es bueno dudar. No dar nada por sentado; porque la duda te obliga a segur mirando por los rincones... Vamos a ver otras inscripciones "poco visibles"
Páginas consultadas: |