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LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
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-CASTILLO DE MARCUELLO- (BIC. 22-V-2006) |
   UTM 30T 690337 4688649 1005 m. Descargar track GPS "Huesca-Loarre-Marcuello" (*.plt) |
A pesar de las repetidas denuncias en prensa sobre el abandono de lo que resta de la torre de Marcuello y de la inevitable comparación con las actuaciones de consolidación llevadas a cabo en Perarrua, este castillo prosigue inexorable su derrumbe sin que pueda hacer más que manifestarlo y dar testimonio fotográfico de la dejadez hacia parte de nuestro patrimonio (22.Febrero.2004).
Pasa el tiempo y en 2016 las cosas siguen igual, es decir, peor. Van cayendo sillares y dinteles de madera de sus vanos sin que a nadie parezca importar su anunciado destino. Probablemente estas imágenes darán testimonio de su situación actual cuando suceda lo irremediable (12 de febrero de 2001, 2003, 2004, 2005, 2006, 2007, 2008, 2009, 2011 y 2016).
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Por la carretera que une Ayerbe con Loarre, un par de kilómetros antes de este lugar y enfrente del desvío hacia el pantano de Las Navas, sale un ramal a la izquierda que nos lleva hacia Sarsamarcuello. (El track GPS que ofrezco contiene una bonita variante que es acceder desde la mitad de la carretera que asciende al castillo de Loarre, a media ladera de la sierra hasta el castillo. Buena pista, si la climatología lo permite). Atravesando el pueblo de Sarsamarcuello y siguiendo la serpenteante pista ascendente hacia el noroeste llegaremos hasta la impresionante situación del castillo de Marcuello. (Necesario 4 x 4). Durante buena parte del recorrido se divisa claramente los restos de la torre, facilitando la orientación. Es visible desde gran parte de la Sotonera vigilando el estrecho que el Gállego ha tallado en la sierra. En el comienzo de la última amplia curva antes de llegar a la plataforma en que asienta la fortificación, la vista de conjunto del mismo es espectacular. Merece la pena "parada y foto" (Imagen 3).
Desde la plataforma rocosa sobre la que se alza la torre, (Imagen 1) se domina visualmente gran parte de la Sotonera, la entrada del Gállego en la misma a través del portillo del que forman parte los Mallos de Riglos (Imagen 15) y el curso medio de dicho río en el llano. Además, se controla visualmente Murillo de Gállego y el valle que por Agüero-San Felices-San Miguel de Liso toma dirección a las Altas Cinco Villas. En los días despejados, hacia el suroeste se ve el Moncayo. La ermita de San Miguel, románica del siglo XII, de la que queda la cabecera y el primer tramo de la nave, subsiste a pesar del olvido (Imagen 4). Junto a ella la pista sigue hacia el este, hacia el "mirador de los buitres", lugar con espectaculares vistas sobre los mallos de Riglos (Imagen 15). Otra pista desde la citada ermita, esta vez en dirección norte, permite el paso a los más aventurados hacia el pantano de la Peña por la foz de Escalete.
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En su inicio, este castillo pudo ser mota de viglilancia bajo el reinado de Sancho III el Mayor de Pamplona, continuada por su hijo Ramiro I en primera instancia, para ser alzado durante el reinado de Sancho Ramírez. En la actualidad a duras penas se resiste a venirse abajo el lienzo norte de su torre. Quedan vestigios del recinto y al sur de la torre se conserva la iglesia del castillo con aspecto en su cabecera sobrio y defensivo como un cubo de muralla (Imagen 9). Muy retocada en el siglo XVII, conserva una interesante cripta.
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La torre de la iglesia castrense (Imagen 9) también presenta aspecto sobrio y defensivo. Ambas están realizadas con cuidada y ajustada sillería en la que pueden verse marcas de cantería. Edificaciones adosadas de cronología muy posterior ocultan su fachada sur (Imagen 6).
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A juzgar por lo que resta de la torre debió tener cuatro plantas rematadas por una falsa o sobrado, como era lo habitual. (Imágenes 5 y 10 a 12). Se aprecian retranqueos y huecos de mechinales en su muro oeste para sustentar el suelo de las mismas. La planta baja suele ser dedicada a aljibe y almacén y cuenta con pequeños vanos aspillerados de ventilación (Imágenes 5 y 11). La planta primera suele ser la de de acceso en altura, defensivo, de la que no se ha conservado el lienzo que contuviese la puerta (probablemente abriese al sur, hacia el interior del recinto). Conserva dos vanos de medio punto dovelados y con sesgo convergente en su dirección. Al exterior son aspillerados y rematados por pequeño dintel monolítico que remeda medio punto (Imágenes 14 y 14 a)
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La planta segunda, defensiva, muestran dos vanos enteros con mechinales reveladores de la existencia de cadalsos (Imágenes 8 y 14). La planta tercera posee otro vano de similares características tresbolillado con los inferiores así como la jamba interna de otro, por lo que este lienzo tendría dos vanos con cadalso. Los vanos de la planta segunda poseen dinteles realizados con maderos. El conjunto se cerraría, como es habitual por medio de tejado de madera a dos aguas sobre falsa o sobrado con pequeños vanos que no se aprecian. Es lamentable su estado y sobre todo el abandono, que no le augura ningún buen porvenir. No sería excesivamente costoso ni difícil consolidar estos históricos restos, al estilo de lo que se ha hecho, por ejemplo, en lo que resta de la torre de Perarrua.
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Los restos de la torre de Marcuello se hallan parcialmente circundados por parte de un amurallamiento que reforzó las zonas que la propia orografía no lo hacía. El dibujo de la planta hecho por Adolfo Castán (Imagen 17) orienta perfectamente sobre este asunto. La imagen 16 es activa. Situando el cursor sobre ella aparece un perfil que pudo ser el original del sitio.
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Hay un aspecto en los muros que rodean parcialmente la torre que me parece de gran interés. Me refiero a la existencia de un entramado de madera que rigidiza la estructura impidiendo alabeos de la misma. La ruina de su estructura ha propiciado que su interior quede a la vista en algunos lugares de tal modo que podemos reconocer maderos durmientes dispuestos de tal modo que forman un entramado geométrico y que, como demostró con sus fotografías Aldolfo Castán dichos maderos fueron fijados con clavos de hierro para después ser emparedados por la estructura de mampuestos y de mortero de cal. Es una forma sorprendente de edificar, acaso por que la desconozcamos. Creo que trasluce una manera arcaica de edificar cuando la estructura no se basa en buenos sillares bien escuadrados como ocurre en el románico pleno. Las imágenes 18 a 21, que también son activas y que ponen de manifiesto los puntales estructurales de madera así como los huecos que han dejado los maderos desaparecidos y que he señalado con puntos amarillos.
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Las imágenes 22 y 23 muestran la impresionante vista que desde la proximidad del castillo se tiene sobre los mallos de Riglos y el portillo de la penetración del Gállego en la llanura oscense. La primera está tomada desde el "mirador de los buitres", una especie de bunker desde el que observar las grandes rapaces que pasan majestuosas muy cerca, sin advertir nuestra presencia. Es una de las salidas en el entorno de Huesca que merece la pena hacer (necesario 4 x 4). La segunda muestra un atardecer con la amenazante oscuridad que por dejadez se cierne sobre el porvenir de este sitio histórico.
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