Pero no solo
han sido las pinturas las que han salido ganando con la restauración.
Los elementos decorativos como capiteles y rosetones también destacan
más. En la imagen 1, el rosetón del ábside
central, de bella hechura geométrica de evocación mudéjar
orlado de hojas cuyos peciolos y foliolos inferiores fueron tomados en
tiempo por grafía árabe dada la dificultad de su correcta
observación por la altura del mismo.
1
2
Los capiteles
que rematan los grupos de columnas se decoran en su mayoría a base
de motivos vegetales y geométricos; pero también hay varios
que rememoran el antiguo estilo románico y traen a escena diablos,
alegorías del mal, lucha del bien y el mal (imágenes
6 y 7), San Miguel derrotando al maligno en forma
de dragón (Imagen 8), etc.
3
4
5
6
7
8
9
10
La
imagen 10
muestra en detalle los capiteles que coronan la columnata de la unión
entre nave y brazo sur del crucero. La mayoría de los capiteles lucen
decoración vegetal, a excepción de uno que ostenta dos leoncitos
afrontados (Imagen 11). Los capiteles
de la imagen 13, corresponden a un ventanal del ábside central. Podemos ver
tres cabecitas entre motivos vegetales (¿alegoría de la Trinidad?), cuadrúpedos elevados hacia una piña y un ser monstruoso que más
parece dinosaurio por su recia y gruesa cola.
11
12
13
14
Hay un detalle
curioso y remarcable, que se ha puesto de manifiesto al realizar la limpieza
exhaustiva del templo: los extremos inferiores de las columnas lucen un
tramo decorado con pequeñas perforaciones en la parte alta de las basas
(Imagen 14).
Ibieca está
de enhorabuena por la restauración. Su actual alcalde, el Sr. Ángel
Arilla, nos muestra el templo orgulloso a la par que ya piensa en una
excavación de la explanada al norte del mismo que a buen seguro pondrá
de manifiesto el perímetro del claustro. La pista
-sin ser mala- tampoco está en las mejores condiciones para su visita.
Un centro de interpretación en el pueblo, donde explicar a los visitantes
lo que después verán... Muchos proyectos para una joya que
sigue siendo desconocida y poco apreciada por la mayoría de los oscenses
y que merece sin duda su difusión y conocimiento.