LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO

Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España)

 

| Presentacións | Novedades | Mapa del Sitio | Mapas Activos | Opinión | Castillos XI-XIII | Rutas Románicas | Monográficos | Otras Regiones

Enlaces | Bibliografía | Diccionario | Distinciones | Premio Romanico Aragonés | Fondos de Escritorio | Inicio |

 

-FRAGA.VILLA FORTUNATUS-(Cont.)-



UTM 31T 276480 4604266 119 m

(BAJO CINCA)

Ver mapa interactivo de la zona


1

"CANCEL DE IGLESIA HISPANO-VISIGODA

SIGLO VI D. C. VILLA FORTV-NATVS, FRAGA (HUESCA)

Es una de las escasas esculturas de época hispanovisigoda conservada en Aragón.

En la zona superior muestra una interesante fila de arquillos de más de medio punto que representa la arquitectura de una iglesia. En el centro un crismón con alfa y omega encerrado en un círculo, y en el lateral derecho, izquierda del espectador, una pilastra con capitel corintio, muy esquematizado, que reproduce las columnas y capiteles de las iglesias del siglo VI.

Este cancel estaría integrado en una iglesia rural del siglo VI que se construyó sobre una antigua villa romana."

2

3

En el mes de julio de 2010 me enteré de la exposición temporal de una serie de piezas habitualmente no expuestas en el museo provincial de Zaragoza. Entre ellas, una que suscitó mi interés por cuanto no había tenido la posibilidad de ver ni fotografiar y que tan solo conocía por imágenes en publicaciones. Me refiero a la pieza esculpida que contiene un crismón cristológico y que según se explicita en la cartela informativa del museo, correspondió a un cancel hispano-visigodo de la iglesia del siglo sexto de nuestra era edificada sobre la antigua villa romana de Fortunatus. En su zona superior muestra una serie de arquillos, seis en origen; en dos grupos de tres con un vano central bajo dintel plano. Los arquillos apean por separado, sin salmer, en capiteles donde aún se puede adivinar una sencilla decoración foliácea. Más abajo, columnas alzadas sobre basas con doble moldura. Todo ello rehundido en un marco sustentado por dos columnas (falta una en la pieza) que enmarcan al crismón.

4

El crismón es del tipo denominado por Matarredona y Olañeta como "cristológico", tipo cuya característica principal es la de no poseer el símbolo "S" sobre el brazo vertical inferior. Por lo demás, comparte características con el resto de crismones correspondientes al modelo visto en las monedas de época constantiniana y probablemente en su lábaro. Lo hallamos rehundido por dos veces, al modo de lo que en lugares como Lárrede, cuando esto ocurre con un vano aceptamos sin rechistar que es fruto de la tradición islámica... Quizá haya que volver de nuevo los ojos a lo hispano-visigodo como hace tiempo vengo creyendo, en especial desde que comencé a mirar con otros ojos a la arquitectura de Serrablo y sus arcaicos antecedentes locales.

56

7

Posee seis brazos bulbosos en su extremo exterior a cuyo nivel se integran con suavidad en el aro-marco que lo contiene y que se decora por medio de un círculo inciso en el que convergen pequeñas incisiones formando una especie de raspa de pez, circular, sin principio ni fin y que le aporta sensación de movimiento continuo (nada es casual y el pez "ICHTUS" es uno de los más antiguos símbolo cristológico por el juego jeroglífico de sus letras con "Iesus Christos Theou Uios Soter" Jesus, Cristo, hijo de Dios, Salvador). También vemos los símbolos "X" y "P" en modo ortodoxo y asimismo las letras alfa y omega situadas bajo los brazos superiores, con los que no alcanzan a contactar.

8

Para finalizar la mirada detallada a esta interesante pieza, el capitel que corona una columna enmarcada en pilastra ahuecada. A pesar de la descripción académica de la ficha del inicio, la sensación que a mi me transmite es la de unas formas orientalizantes, quizá hacia formas vistas en capiteles de templos egipcios como en los llamados "papiriformes" o en los "compuestos egipcios".

9

En la imagen superior (9) he reconstruido mediante técnica informática el aspecto original que debió de tener la pieza. De ese modo, cobra fuerza y transmite simbología. El centro, rehundido por dos veces, lo ocupa el crismón, la divinidad identificando simbólicamente de modo unívoco a Cristo, tanto por su anagrama como por la alusión a "Ichtus". Para llegar ante Él, dos escalones, como en los templos. Enmarcándolo dos columna y arriba en lo alto, la simbología de un templo con su puerta mostrando el acceso. Quizá la Jerusalén Celestial.

Sin duda una pieza magnífica e interesante a través de la que conectamos el mundo medieval con lo hispano-visigodo y con lo paleocristiano.


ATRÁS


Páginas consultadas:

Ver mis estadísticas