BIOTA. RUINAS DE LA IGLESIA SUPERIOR-(Cont.)

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Ya se nos está acabando este 2012, año marcado por la crisis económica que nos ha afectado a todos en general y al patrimonio cultural en particular. En una reciente charla en Barbastro nos decía el amigo "Peridis" que tenemos por delante quince años de vacas flacas en las que la cultura va a sufrir un serio retroceso. Apuntaba a las Asociaciones y a la imaginación para salir adelante, o al menos para no perder parte de lo mucho que poseemos.

En lo personal, el descubrimiento de un zodiaco esculpido y reutilizado en el ábside central de la catedral de San pedro de Jaca así como la enorme sorpresa de haber sido propuesto y nombrado Académico de la Real de Nobles y Bellas Artes de San Luis vienen a paliar un poco lo apuntado.

Ayer recibí una llamada de Carmen Marín, la arqueóloga que está llevando a cabo la excavación del templo románico aparecido en Biota. Me invitaba a acudir hoy domingo 30 de diciembre para ver en primera fila el resultado de esta primera fase de la excavación, los hallazgos materiales y las posibilidades de futuro de este "nuevo" templo, así como para escuchar mi opinión al respecto.

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La colmatación del lado sur de la nave que veíamos en las imágenes de la pagina anterior ha sido retirada, hasta el nivel del pavimento de cerámica, moderno. Gracias a este desescombro se ha confirmado la situación previsible de la puerta de acceso al templo (Imágenes 4 a 8). En la excavación de ese espacio de pórtico aparecieron elementos escultóricos que decoraban la portada, como una deliciosa cabecita de la Virgen y fragmentos de baquetones decorados con motivos vegetales de hechuras góticas (Imágenes 9 a 11). En la imagen 8, facilitada por Carmen se aprecia el lugar de aparición de los elementos descritos que han sido recolocados en su lugar aproximado de aparición.

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En mi anterior visita pude fotografiar in situ una pieza que fue parte de una nervadura con perfil de tres baquetones, más sobresaliente el central al modo de las nervaduras del ábside de Puilampa o de las crucerías de la capilla del castillo de Sádaba. Debía de haber al menos una docena, pensando el las piezas absidales; pero no aparecieron más en el derrumbe. Quizá tras la primera ruina del templo fuesen reutilizadas como material de edificación en otros lugares.

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Sin duda el motivo que acapara las miradas de todos así como la satisfacción de la arqueóloga es una cabecita de la Virgen que quizá adornó un hipotético tímpano o algún otro elemento de la portada (Imágenes 11, 12 y cabecera)

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Es una cabecita portando corona decorada con gemas, algunas de perfil romboidal, superpuesta a un velo que cae por los laterales hasta la zona anterior del cuello. No están trabajados detalles como los ojos, por lo que creo que el acabado debió de ser pictórico y de hecho quedan algunos rastros de su policromía.

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Satisfacción de Carmen y de los asistentes mayoritariamente entusiastas del románico, además de gentes de Biota y del pueblo de Carmen que han venido a acompañarla en esta presentación pública. El alcalde de la localidad y la concejala de cultura han asistido con gran interés a esta interesante mañana del último domingo del año, interesándose por muchos de los detalles y escuchando propuestas de futuro para este destacado hallazgo para Biota, para las Cinco Villas y para todo el románico hispano.

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A pesar de lo expuesto, no está todo dicho sobre este templo y sobre su historia. En el lado norte de la nave a poca distancia de las basas centrales, afloran entre los ladrillos de cerámica del pavimento dos columnas de sección cilíndrica que desorientan por completo (Imagen interactiva 13, e imágenes 14 y 15). No tiene justificación en relación con el templo visto por lo que se impone una prospección del subsuelo para ver a qué corresponden y la posibilidad de que haya una estructura previa sobre la que se erigió el mismo. Teniendo en cuenta la riqueza arqueológica del entorno inmediato, no sería descabellado pensar en un antecedente romano bajo el nivel de este templo.

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Diversos materiales reutilizados pueden rastrearse con facilidad en el muro al sur del templo (Imagen 16). Dovelas con decoración de baquetón y puntas de diamante pertenecientes a la portada pueden advertirse en el mismo. Es probable que si se desmontase ese muro añadido, aparecieran formando parte de su estructura más materiales escultóricos del templo.

Me envía Elena el "posado" de final de la mañana en la teórica zona del coro de la nueva iglesia de Biota. De izquierda a derecha: el que hace esto, Carmen, la feliz arqueóloga, Roberto, Tino y Elena. "Ojeras malva y barro en el tacón", por mor de la fría mañana, que no por excesos como canta Sabina ;)