UTM 30T 268901 4680765 636 m.

(SOBRARBE ) Ver mapa interactivo de los castillos

La torre del recinto fortificado de Abizanda tiene planta rectangular de 13,5 x 8 m, orientada en sentido este-oeste, 24 m de altura y 2,10 m. de espesor de muros. Se erige sobre la roca mediante grandes sillares en su base procedentes de la torre árabe. Está organizada en cinco plantas al interior, al cual se accede a través de una preciosa puerta lombarda de arco de medio punto dovelado con dobladura, que apea en dintel monolítico delimitandoun tímpano cegado (Imágenes 1 y 2). Se sitúa en altura, en la segunda planta, como es habitual en este tipo de edificios. Los mechinales a ambos lados de su dintel indican que tuvo una estructura avanzada, tipo cadalso, protegiéndola y proporcionándole apoyo a la estructura de acceso.

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Su lado menor este (Imágenes 3, 5 y 9) presenta vanos aspillerados en las plantas 1, 2 y 4. En la 3ª planta vemos una ventana geminada cegada y reconvertida en capilla al interior. A su izquierda el vano de ventilación del retrete; y en un nivel inferior el desagüe del mismo (Imagen 5). Es curiosa la proyección de la sombra de la cúpula de la iglesia sobre esta zona en las primeras horas del día (Imagen 6). En el muro norte hay pocos vanos: dos ventanas aspilleradas en la 1ª planta; y una en la 2ª. (Imagen 6). Los vanos de la planta 1ª, que se usaba como almacén, están altísimos; justo bajo el nivel del suelo de la planta de acceso puesto que su función era tan solo de ventilación y no visual o defensiva.

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En el muro de poniente (imagen 7) se aprecia centrada una ventana aspillerada por planta, a excepción de la planta tercera en la que abre un bonito ventanal geminado lombardo (Imagen 8) de hechura similar a los de la Torre de la Reina, de Loarre.

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La imagen 9 es un detalle ampliado correspondiente al lado este de la tercera planta (la planta noble) Muestra la hechura a base de sillarejos y de algún sillar toscamente trabajado, de alturas desiguales y algunos atizonamientos. El vano geminado y rehundido de este lado está lateralizado al lado norte por que en ese muro ha de compartir espacio con el retrete señalado por su pequeño vano de ventilación aspillerado. El ventanal geminado fue cegado con sillarejo hasta el arranque de sus arcos para reutilizar al interior su estructura enfoscada, y decorada como capilla canónicamente orientada. Es evidente que las personas que ocupaban esta tercera planta eran de rango distinguido. Lujos como el inusual retrete intramuro o la existencia de un oratorio reutilizando el ventanal no son habituales en lugares destinados a la soldadesca.