|
|
LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
|
| Presentacións | Novedades | Mapa del Sitio | Mapas Activos | Opinión | Castillos XI-XIII | Rutas Románicas | Monográficos | Otras Regiones Enlaces | Bibliografía | Diccionario | Distinciones | Premio Romanico Aragonés | Fondos de Escritorio | Inicio | |
|
| -ZARAGOZA. CATEDRAL DE SAN SALVADOR, "La Seo" (Cont.)- |
   UTM 30T 676968 4613873 226 m |
(ZARAGOZA) |
1
Acceder al interior del cilindro románico de La Seo es sumergirse en la historia más antigua del templo. No es esta una zona abierta a la visita turística; pero gracias al afortunado conocimiento de un canónigo amigo de la familia (don Francisco del Valle -QEPD-), he tenido eL privilegio de hacerlo, fotografiarlo y compartirlo con todo aquél que desee apreciarlo.
El acceso se efectúa a través de la sacristía mayor, al fondo de la cual una portezuela da paso a una especie de zaguán delimitado por sendos arcos de medio punto con marcas de cantería en forma de flechas (Imagen 3). Entre ambos, a nuestra derecha quedan restos de un vano románico quizá del desaparecido absidiolo. Al "interior" del ábside accedemos por un vano abierto en el propio cilindro absidal entre dos columnas y sobre la propia bancada perimetral corrida (Imagen 4).
La primera vez que se accede a este reducido espacio nos produce una agradable sorpresa ya que, como ,he comentado la austeridad exterior no hace presagiar la riqueza casi "barroca" de lo que nos aguarda en su interior. Decorativamente el tratamiento de este ábside es excepcional. Arquillos ciegos repletos de escultura y adornos, capiteles de gran tamaño con buena labra tanto en sus cestas como en sus ábacos, dos bandas con escenas esculpidas y estatuas de buen tamaño, casi exentas, representando apóstoles de las que quedan dos en magnífico estado e incluso con restos de policromía. Todo un desconocido lujo de escultórica románica de primer orden que permanece semioculto, olvidado y pidiendo a gritos una restauración aparte de la adecuada posibilidad de ser poder ser visitado.
2
En lo visto se advierte la existencia de cuatro grandes semicolumnas adosadas con un módulo realmente excepcional (módulo que el profesor Martínez de Aguirre califica como "orden gigante") que segmentan el cilindro en tres lienzos, cada uno de los cuales se decora con arquillos ciegos en sucesión sobre columnas erigidas a partir de la bancada corrida.
Lo conservado del ábside es el paramento vertical del mismo interrumpiéndose en el punto donde debió de voltear su bóveda. La misma debió de ser de cuarto de esfera reforzada por cuatro nervaduras, continuación de las grandes semicolumnas que confluirían con el fajón del arco triunfal de acceso al cilindro absidal. Es probable que entre la última semicolumna vista y el hipotético apeo del arco triunfal (quizá una semicolumna doble al modo languedociano?) hubiese dos arquillos más en cada lado. Así completarían el número de doce huecos para otros tantos apóstoles, todos ellos orientados hacia el punto central del ábside donde es lógico que estuviese el titular del templo, El Salvador.
3
4
5
6
7
La decoración de los arquillos ciegos, como ya he apuntado, es recargada y casi excesiva sobre todo si se tiene en cuenta el hecho de que se complementa con una serie de bajorrelieves -desde la Creación del Hombre hasta la Expulsión del Paraíso- situados como continuación de las cestas de los capiteles con lo que a ese nivel se creó una recargada banda escultórica plena de información (Imágenes 5 y 6).
8
9
10
11
La otra banda escultórica, a la altura de nuestros ojos, la componen otra serie de bajorrelieves, que además de adornar e instruir con su mensaje, sirven de pedestales a las esculturas de los apóstoles. Apóstoles que quedan encuadrados por las columnas adyacentes y ambas bandas esculpidas descritas conformando un verdadero retablo pétreo (Imágenes 7 a 9).
12
13
14
15
Hay una circunstancia en estas esculturas apostólicas que puede ser de interés. Es el hecho de que no son piezas estructurales como lo son los capiteles, sino que están adosados al cilindro absidal en un pequeño rebaje de apenas cinco centímetros de profundidad labrado en sus sillares. Es probable que estas esculturas de magnífica labra se añadieran al ábside ya concluido para evitar su fácil deterioro, sobre todo dado la situación exenta de las mismas.
Tres apóstoles en cada uno de los lienzos laterales (6), dos más en el central flanqueando a Cristo y vueltos hacia Él (8). Y hasta la docena faltarían cuatro. Por ello creo que en la zona no vista habría dos arquillos ciegos más en cada lado para albergarlos. Y más allá un alargado presbiterio del que no tengo información alguna.
16
17
Los dos magníficos apóstoles que han llegado enteros hasta nosotros son esculturas excepcionales. Traslucen un momento avanzado del románico ya casi gótico. Poseen personalidad en sus miradas. Tienen alma y movilidad. Expresiones perfiles y rizos que a García Lloret le evocan lo visto en el tímpano de San Nicolás de Tudela, y cuyos pliegues de sus vestiduras plenos de volumen y gracia me traen a mi a la memoria lo visto en la psicostasis de Biota. Los restos de policromía en las encarnaciones de sus mejillas o en las niñas de sus ojos, hacen entrañable al apóstol de pelo rizado de la imagen 15.
18
No puedo seguir adelante sin dejar constancia de un detalle anecdótico en relación con la fotografía de este espacio. Desde enero de 2004 hasta octubre de 2007 en que tomé muchas de las fotos que ofrezco, mi ya legendaria cámara Olympus E-1 llevaba a cuestas miles y miles de disparos. En esta ocasión recogíamos información José Luis García Lloret y yo para documentar un libro sobre la escultura románica en Aragón, cuando en las últimas fotos de la jornada la cámara dijo basta. Se estropeó la cortinilla y aparecía en las imágenes una banda vertical oscura (Imagen 18). Para esta fecha ya tenía encargada la siguiente profesional de Olympus, la E-3, pero como no llegaba hasta primeros de enero de 2008 me acerqué a mi proveedor en Zaragoza pensando en comprar un cuerpo Olympus de una serie inferior para salir del paso y usarlo de segunda cámara. Enrique Sánchez el director de MS Audiovisual S. L. no consintió en vendérmelos. Me prestó su E-1 y me "despachó" hasta que llegase la cámara encargada. No es un gesto habitual y por ello dejo constancia del mismo. Como es natural esa actitud logró una "fidelización" como cliente. Luego vendría la E-5, diferentes objetivos... Todo ello para ofreceros mejor calidad de imagen. ¡Ah, si. Se me olvidaba. Envié a reparar mi E-1 y la guardo como "precursora" en perfecto estado de funcionamiento. A una compañera de tantas horas de camino y tantas imágenes bellas, no se la abandona!
